La marca francesa lanza al mercado su cuadriciclo urbano eléctrico, con una autonomía de 75 km y un precio de salida de 7.200 euros
No se puede encuadrar en la categoría de turismos, porque este Citroën Ami es un cuadriciclo ligero de dos plazas, con un motor eléctrico de 8,2 CV (6 kw) y una velocidad máxima de 45 km/h, por lo que puede ser conducido con una licencia de ciclomotor AM y una edad mínima de 15 años.
Básicamente el Ami está pensado para un uso urbano y para ser una alternativa a la movilidad específica de menores y personas que no pueden o no quieren sacarse el carnet B convencional. También tiene un potencial muy notable para ser una alternativa de movilidad para empresas de sharing o de coche compartido.
75 km en carga super sencilla
Su naturaleza 100% eléctrica también contribuye a ese potencial uso urbano, ya que como decíamos al principio cuenta con una batería de iones de litio de 5,5 kWh que le permite una autonomía de 75 kilómetros.
Para recargar se utiliza un cable instalado en el propio habitáculo del Citroën Ami, con un sistema enrollable al estilo de las aspiradoras y que, equipado con un enchufe convencional Schuko, permite una rápida carga de tres horas, lo que le dota de una versatilidad de uso muy superior a la mayoría de eléctricos del mercado.
Potencia limitada
Su motor, fabricado por Valeo, está limitado a los 6 kW que establece la normativa para los cuadriciclos ligeros (L6e) y al margen de los 45 km/h de velocidad máxima no aportan más datos prestacionales, aunque suponemos que no serán de infarto.
Eso sí, este pequeño solo pesa 485 kilos, 60 de los cuales son de la batería. Lo cierto es que estamos ante un vehículo realmente compacto, de 2,41 metros de longitud y 1,39 de ancho lo que lo convierte en el arma ideal para encontrar aparcamiento.
Su bastidor tubular de perfil rectangular de acero es el que aguanta las diferentes planchas de policarbonato que conforman la carrocería propiamente dicha y donde se ancla el esquema de suspensión de tipo McPherson delante y eje de torsión detrás.
Simple y modular
Si su diseño exterior ya es particular, su filosofía interior todavía, es más. Para acceder nos encontramos con dos puertas batientes, pero cada una se abre en direcciones opuestas, la del conductor en contra de lo que estamos habituados y unas llaves específicas para abrirlas, más otra llave extra para poner en marcha el motor.
Una vez dentro comprobaremos que sus acabados y diseño son espartanos, empezando por las ventanillas que son del estilo colgante (como en el clásico 2CV), unos retrovisores de estilo moto fijados al marco y unos mandos de apertura de puertas con correas por tiradores. Para mejorar la sensación de habitabilidad el Citroën Ami ofrece de serie un pequeño techo salar acristalado.
Toques de color y diseño
La parte alta del tablier es plana y tiene huecos modulares que pueden ser de color naranja o verde oliva dorado, mientras que la consola de conducción es realmente básica, con un soporte para móviles y los mandos básicos para la conducción, excepto los del modo de conducción o cambio (este Ami eléctrico no tiene cambio) que en este caso se sitúan en el lateral del asiento del conductor con los simples pulsadores de D de directa, N de neutral, y el R de marcha atrás.
Los asientos son de una pieza plástica con espuma integrada. Son realmente sencillos, pero que aportan una buena habitabilidad a cambio del poco espacio para el maletero que se complementa, como en las puertas de acceso, con un hueco con redecillas en el propio portón.
Básico pero algo personalizable
No hay duda de que este Citroën Ami está pensado para uso básico y sencillo y son pocas, por no decir ninguna, las concesiones a nivel de confort. Lo que sí ofrecerá se un pack de personalización con cuatro combinaciones de colores el My AMI gris, el My AMI azul, el My AMI naranja y el My AMI caqui. Este kit incluye en todos los casos elementos funcionales como la red central de separación, redes para las puertas, alfombrilla, espacios de almacenamiento para el salpicadero, gancho para bolsas, clip para smartphone y la centralita DAT@MI para poder conectar el teléfono del usuario a la app MyCitroën y así poder controlar elementos como la autonomía, el estado de carga, el tiempo de carga, etcétera.
Y además…
Para una personalización aún más exclusiva, Ami ofrece 2 packs extras para mayor personalización e incorporan todos los elementos de decoración anteriores a los que se añaden adhesivos de gran formato en su exterior. El primero es el pack Pop e incorpora adhesivos de colores naranja y detalles desenfadados, juveniles y deportivos, además de un alerón trasero. El segundo es el Pack Vibe, en este caso con stickers en tono gris y elementos de estética elegante como unas barras de techo.
Si este Citroën Ami te convence puedes comprarlo vía online en el siguiente enlace a un precio básico de 7.200 euros. Si apuestas por el Ami con alguno de los packs de colores el coste sube en 400 euros, mientras que quieres las versiones Pop o Vibe estaremos hablando de unos precios cerrados de 8.100 y 8560 euros respectivamente.
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