El neerlandés se impuso en una carrera caótica en el GP de Canadá donde no tenía el mejor coche. Sin embargo, supo aprovechar la estrategia, los errores y los coches de seguridad para imponerse sobre Norris y Russell, que cerraron el podio. Mercedes dio un salto de calidad en el Gilles Villeneuve, consiguiendo así el primer podio de la temporada.
En un fin de semana donde de nuevo Red Bull no tenía el mejor coche, Max Verstappen demostró por qué sigue siendo el mejor piloto de la parrilla. Con el mundial más apretado desde 2021 (aunque todavía no nos lo creamos), los rivales no se ponen de acuerdo para cazar al #1 en los momentos de mayor debilidad. Con la lluvia sobre Montreal, todos cometieron errores, pero fue el equipo de la bebida energética quién mejor leyó la carrera a pesar del sorprendente ritmo de McLaren.
La lluvia puso patas arriba el GP de Canadá
La carrera comenzó con mucha cautela por parte de todos, tanta, que solo los Haas de Kevin Magnussen y Nico Hulkenberg se la jugaron a montar el neumático full wet. Al principio les salió bien y el danés llegó a acariciar el podio, pero en cuanto se secó la pista se disolvieron cual azucarillo. A partir de aquí la carrera se volvió muy estratégica. Mientras se abría el carril seco y los intermedios se desgastaban, los ingenieros avisaban a sus pilotos de la llegada de más lluvia. Había que conservar gomas a toda costa.
Cuando Verstappen atacaba al ‘poleman’ Russell por la victoria, el error de ambos dio pie a un electrizante Norris para ponerse líder de la carrera. Logan Sargeant animó aún más la fiesta tras chocar en la curva 4 y provocar el primer coche de seguridad del día. McLaren tuvo mala suerte con el timing de la salida del Mercedes AMG de Bern Maylander, y Lando cayó hasta la tercera posición.
Con la previsión de más lluvia que finalmente se cumplió, todos optaron por mantener los intermedios. Solo quedaba esperar al ‘crossover’ de los slicks para intentar algo diferente, ya que para adelantar había que tenerlo bastante claro. De esta forma, Norris trató de luchar por la victoria quedándose en pista un par de vueltas más que el resto, para así hacer un overcut en lo que Verstappen y Russell se peleaban por calentar el neumático de seco. La jugada le salió bien a medias. Salió primero por muy poco, pero con goma fría. Así que Verstappen lo tenía hecho para ganar el GP de Canadá.
Red Bull no necesita tener el mejor coche
Norris y Russell libraron una intensa batalla mientras el de McLaren sufría por calentar sus neumáticos medios. Pero a partir de aquí la victoria ya estaba decidida. Solo quedaba esperar a ver cómo se organizaba el resto del podio. El #63 aprovechó un error de Norris para recuperar el cajón de plata, pero luego cometió un error y todo quedó como estaba. También fue interesante su lucha al límite con Piastri en la chicane de la meta. El último Safety Car del día provocado por el choque de Sainz y Albon, descolocó de nuevo la cabeza de carrera, lo que nos dejó una bonita batalla entre los Mercedes por el podio a falta de 2 vueltas del final.
El GP de Canadá ha sido una de las mejores carreras de esta temporada 2024 donde hasta el último momento no sabíamos quién iba a ganar. Max se quejaba constantemente de que el coche no era perfecto y no podía tocar los pianos, y aún así entre ritmo, regularidad y estrategia el holandés se volvió a imponer para conseguir la victoria nº60 de su carrera deportiva. Por contra, su compañero Checo Pérez (recién renovado por dos temporadas) mostró lo que no hay que hacer con uno de los mejores coches de la parrilla. Cayó en Q1, se tocó en la salida con Gasly y se chocó él solo para terminar abandonando.
El desastre de Ferrari en el GP de Canadá
Debacle en Ferrari. Quizá fue una sensación del que escribe, pero después de ver como los dos coches rojos caían en Q2 después de una clasificación nefasta donde ninguno de los pilotos encontró el ‘grip’, con la previsión de lluvia y la tendencia a liarla de sus estrategas, todo hacía ver que los de la Scudería lo tendrían crudo para puntuar. Leclerc empezó achacando por radio problemas de potencia, algo que lastró la remontada inicial. Carlos continuaba a la suya sin agarre, y en el tren de la zona media-baja.
En el primer pitstop tras el Safety Car, a Ferrari se le ocurrió la brillante idea de resetear el coche de Leclerc (perdiendo 24 segundos) y ponerle neumático duro sabiendo que llovería minutos después. Su ingeniero le insistía en mantener el coche por lo negro, pero era imposible. El monegasco, que venía de celebrar su victoria en casa, acabó doblado y abandonando. Carlos Sainz por su parte, con el alerón dañado por la intensa pelea de la zona media, trompeó y se llevó puesto a Albon. Al final, doble abandono de los pilotos del Cavallino Rampante en el GP de Canadá.
Aston Martin puntúa con sus dos coches
Fernando Alonso acabó 6º después de una carrera de resistencia contra Hamilton, pero en su propia liga. En las primeras vueltas donde el full wet de los Haas era más rápido, acabó cediendo la posición con el danés. Luego aguantó con temple los ataques del heptacampeón en el momento donde más riesgos había que asumir para adelantar. Fue en boxes donde perdió el quinto puesto contra el de Mercedes, luego de una parada bastante lenta de Aston Martin.
Tras ello, carrera de trámite para el asturiano que a pesar de las bondades del AMR24 para calentar los neumáticos en condiciones frías, no pudo acercarse a la disputada cabeza de carrera. Las sensaciones en libres y clasificación fueron realmente buenas. Quedó a apenas dos décimas de la pole, pero el domingo la realidad hizo acto de presencia y el ritmo no daba para más. Su compañero y anfitrión, cerró una carrera “aceptable” en los puntos para el conjunto británico. Próxima parada: GP de España en el Circuit de Barcelona Catalunya del 21 al 23 de junio.
Fotos: RedBull Content Pool / Ferrari (Xavi Bonilla: DPPI)
