La marca recupera para Europa y para nuestro mercado el Toyota Highlander, un SUV híbrido de filosofía americana con espíritu europeo
El Toyota Highlander es un SUV que hace veinte años se vende en mercados como el americano, japonés y australiano.
Por lo tanto, es la cuarta generación de un modelo muy probado, de mucho éxito en mercados como el americano y donde es uno de los modelos más vendidos de Toyota, pero donde se considera un SUV medio.
Allí es medio, aquí es enorme
Esto es en EE. UU., donde el concepto de vehículo es muy diferente, pero aquí un coche de casi cinco metros de largo (4,96 metros) y las tres filas de asientos y siete plazas lo colocan en lo más alto del segmento SUV y es precisamente aquí donde la marca nipona quiere competir en el mercado del viejo continente.
Hasta la fecha la marca tenía cubierto del segmento C con el C-HR y el D con el todo poderoso en ventas RAV-4. También ha anunciado que este mismo año el Yaris Cross, otro SUV que vendrá a cubrir la parte baja del mercado en su categoría de compactos B. Así pues, solo les quedaba cumplir en lo más alto del escalafón SUV con un coche grande y donde entra este Toyota Highlander.
Tres filas de asiento y siete plazas
Hasta la fecha los argumentos para los clientes que buscaban un Crossover de siete plazas pasaba obligatoriamente por el Land Cruiser, una opción, que por su especialización off-road, difiere notablemente de la gama SUV. Ahora con este SUV de corte premium y la misma filosofía híbrida de toda la gama viene cumplir este objetivo. (aquí tienes toda la gama 4×4 de Toyota)
No esperan muchas ventas, dicen que alrededor de 500 unidades anuales, pero sin duda tendrán un objetivo muy claro y que es cubrir las necesidades de esas familias de cinco o más miembros, con unas grandes necesidades de espacio y que no quieren renunciar a la filosofía híbrida y movilidad que garantiza este Highlander.
Muy por encima del RAV4
Como decimos se trata de un coche grande, 4,9 metros de largo (36 cm más que un RAV4), por 1,93 de ancho y 1,75 metros de alto. Unas cotas que, no obstante, se apoyan en su enorme batalla que, en comparación con un RAV4 gana 16 centímetros hasta alcanzar los 2,85 metros de largo.
Estas dimensionen le permiten ofrecer tres filas de asientos relativamente útiles. Es cierto que la tercera fila tiene un acceso destacable y en líneas generales cumple con respecto a dimensiones y confort, pero seguirá siendo una zona reservada exclusivamente paras los más pequeños de la casa.
Máxima habitabilidad
En cambio, la segunda fila de asientos es enorme. Cuenta con desplazamiento longitudinal de la banqueta (18 cm) y asegura un confort más que notable. Las delanteras son, sobre todo, anchas y con una disposición muy americana, con asientos amplios y confortables y una configuración de botones y mandos generosos en cuanto a dimensiones y distribución.
El Toyota Highlander puede llegar con pantalla central de 8 pulgadas o una panorámica de 12,3” para el acabado superior.
Calidad Premium
En general el compromiso de calidad es muy alto, tanto de materiales como de calidad de montaje. Sin duda un compromiso premium que casa con el completo equipamiento de confort y multimedia.
El maletero es otro aspecto para tener en cuenta por sus generosas dimensiones. Con siete plazas tiene 267 litros una capacidad dentro de los estándares del segmento E, pero cuando abatimos esta 3ª fila en el hueco del maletero hasta la bandeja pasa a conseguir un volumen de 579 litros con la 2ª fila retrasada o 658 litros si se adelanta. Pero si se aprovecha todo el espacio hasta el techo estas cifras pasan a ser de 332, 737 y 865 litros respectivamente. Sin duda, otro argumento de peso para el público que necesita este tipo de coche.
Eficaz como crossover híbrido
Prestacionalmente ya os lo hemos dicho, se trata de una versión híbrida, la única disponible en nuestro mercado. En este caso para Toyota Highlander se apuesta por la cuarta generación de hibridación con motores eléctricos delanteros en paralelo (uno motriz y otro generador) en vez de los actuales sistemas en serie.
Por otro lado, este modelo recurre al nuevo motor 2.5 del RAV4 aunque potenciado hasta los 192 CV, lo mismo que ese motor delantero que de los 88 kW del RAV4 pasa a ofrecer 134 kW, mientras que el trasero, porque Toyota Higlander solo se ofrecerá en versión de tracción integral se mantiene con los mismos 44 kW de su hermano pequeño.
Potencia combinada
Con todo, la potencia combinada de estos motores se queda en una media estándar de 248 CV asociadas a un cambio de tipo variador y la tracción total inteligente de gestión y entrega eléctrica AWD-i de Toyota, además del sistema de tracción Trail para uso off-road y los tres modos de conducción ECO, Normal y Sport y el eléctrico EV.
Las suspensiones del Highlander reciben una serie de modificaciones para adaptarlo a los gustos europeos, pero en líneas generales sigue siendo un coche extremadamente confortable, que filtra muy bien las irregularidades del piso y los ruidos aerodinámicos.
Eficiacia dinámica
La planta motriz empuja con decisión, con un buen reparto de par entre ambos trenes, y que se produce de forma completamente automática, asegurando una motricidad impecable. Tal vez, como ocurre con el RAV4, que tiene un cambio CVT similar, peca de deslizar excesivamente cuando aceleramos fondo, dando la sensación de poca respuesta y reduciendo el confort de marcha.
En nuestra opinión, si Toyota se olvidara estos CVT y apostara por un cambio de marchas convencional o de doble embrague automático serían la referencia indiscutible en sus segmentos, porque el resto del conjunto híbrido y dinámico es una de las mejores alternativas.
Dos acabados
Volviendo al Toyota Highlander hay que decir que solo se ofrecerá en dos acabados únicos, el Advance y el Luxury.
El primero ya llega con una dotación muy premium con elementos como los asientos delanteros eléctricos y calefactables, cámara de visión trasera, climatizador trizona, acceso y arranque sin llave, sistema multimedia Toyota Touch2 con pantalla de 8 pulgadas, así como el sistema de seguridad integrado Smart Sense de segunda generación de Toyota, el sistema de precolisión con detención de peatones y ciclistas, reconocimiento de señales de tráfico, control de crucero adaptativo inteligente, luces automáticas de carretera y avisador de cambio involuntario de carril con corrección de la dirección.
Precios premium
Esta versión Advance cuesta 52.000 euros con las ayudas y financiación incluida, y al que se le puede añadir un techo solar panorámico como extra con motivo de lanzamiento por sólo 500 euros extras, además de hasta ocho pinturas de carrocería.
El acabado Luxury amplía la dotación con asientos delanteros ventilados, volante calefactable, retrovisor interior electrónico, cámara de 360 grados, apertura del portón eléctrica por gesto de pie, Head Up Display a color, navegador Toyota, sistema de audio JBL y la pantalla central de 12,3 pulgadas. No obstante, el precio sube hasta los 62.900 euros, porque en este modelo se pasa del modelo impositivo del 4,75% del Advance con 158 g/CO2 al 9,75% del Luxury que salta de franja a los 161 gramos.
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