El modelo de acceso a la gama de los T-Roc, un coche SUV situado por tamaño entre el T-Cross y el Tiguan, mide exactamente 4,23 metros y tiene cinco puertas. Las dos primeras cosas que observamos es que es un automóvil muy equilibrado, tanto en cuando a comportamiento dinámico como a comodidad.
Para los que sigan despistados: es un tricilíndrico de 110 caballos montado sobre la misma plataforma que el Volkswagen más mítico… porque en esencia y simplificando el Volkswagen T-Roc es un Golf, pero más alto: en versión SUV e igual de elegante y concienciado con el medio ambiente.
Nosotros hemos probado el acabado Life, que en realidad no es el acceso a la gama porque hay otra variante algo más barata sin un nombre específico y con menos extras. Por encima de este tricilíndrico, también es muy aconsejable. Pero no mucho más cara: la versión de 150CV, 1.498 centímetros cúbicos y cuatro cilindros.
Sólido, bien construido
El coche de 115 es sólido de carácter, eficaz por naturaleza, germánico de líneas y más espacioso por dentro de lo que parece por fuera. Y sólido, bien construido. No sé si te volverá loco, pero jamás te fallará, te hará viajar seguro y por todas partes te mostrará buenos materiales y encajes.
Las plazas traseras son amplias para el tamaño del coche y a la intermedia no le sobra espacio para las piernas. El auto se mueve bien con cinco personas a bordo. Los 445 litros del maletero con la configuración de banqueta trasera abatida están bastante bien para un coche de su tamaño.
El coche no se puede adquirir con cambio automático. El manual de seis marchas es preciso y casi delicioso para los cuatro locos que todavía no preferimos los automáticos porque nos gustan los coches. Si se emplea con precisión y agilidad, si no se duerme uno a la hora de cambiar, da como resultado una gran comodidad de viaje con un motor voluntarioso a partir de 2.000 rpm.
Obviamente, esto y su longitud de 4,23 metros lo convierten en un coche que encuentra su hábitat perfecto en la ciudad y sus alrededores, pero también hay motor suficiente para viajes interurbanos.
Te dará todo lo que tiene
No es un coche de carreras, pero cualquier sabio te aconsejará que, antes de partir, te mentalices para pedirle a cada máquina lo que puede darte; aquello para lo que fue diseñada. No más. El Volkswagen T-Roc 115 Life te ofrece prestaciones razonables, muy pocas vibraciones y una imagen muy sólida con muchas líneas horizontales.
En cuanto al consumo, la media de nuestra prueba fue de 6,5 litros a los 100 kilómetros circulando por autovía, carretera y ciudad. Volkswagen ha montado en el coche un depósito de gasolina de 50 litros, así que si conducimos razonablemente podremos superar los 700 kilómetros de autonomía con este coche que luce la etiqueta C de la Dirección General de Tráfico.
Si queremos un SUV Volkswagen algo mayor, tenemos el Tiguan, que mide cuatro metros y medio de longitud: 27 centímetros más. Si queremos uno más pequeño, el T-Cross mide diez centímetros menos que el Volkswagen T-Roc. Prácticamente, son coches a medida.
Ficha Técnica VW T-Roc
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