Ford incorpora una nueva plataforma motriz híbrida en sus variantes de siete plazas y filosofía monovolumen
La marca acaba de poner a la venta el Ford S-Max y Galaxy Hybrid, dos versiones equipadas con la tecnología híbrida que puede relanzar a ambos modelos a los puestos que se merece.
Pocas alternativas de filosofía familiar y modular tenemos en el mercado, dos de ellas son este Ford S-Max, el más compacto y deportivo, y el Ford Galaxy, un modelo que es la apuesta más monovolumen de las dos, pero ambos son una alternativa para mover familias de hasta siete pasajeros con suficientes garantías de habitabilidad y maletero.
Hibridación convencional
Ahora la marca ha decidido que ya era el momento de dotarlo de una de las plataformas más demandas en Europa. Para ello ha recurrido a l sistema híbrido automático compuesto por un motor gasolina 2.5 de ciclo Atkinson más un motor eléctrico alimentado por una pequeña batería de 1,1 kWh.
Esta combinación asegura una potencia de 190 CV y que se gestiona de forma completamente automática en cuanto a flujos de energía, como de transmisión de fuerza, que siempre se hace al tren delantero y mediante la caja de cambios automática CVT power Split.
Funcionamiento automatizado
Puntalmente el sistema es capaz de empezar a mover el vehículo en modo completamente eléctrico para luego recurrir al motor térmico cuando lo necesita. También es capaz de desconectar en momentos puntuales el térmico a altas velocidades y utilizar la energía almacenada en la batería para funcionar eléctricamente.
La carga de esta batería se hace tanto por la que produce el propio motor térmico como por la recuperación energía en las frenadas y que según el fabricante supone recobrar un 90% de la energía de la frenada.
La oferta disponible
Los Ford S-Max y Galaxy Hybrid seguirán compartiendo cartelera con el motor diésel 2.0 TDCi de 190 CV, aunque en el caso de las variantes híbridas nos propone un consumo de 6,4 litros a los 100 km, así como unas emisiones de 146 a 149 gramos de CO2, así como la etiqueta ECO que la diésel solo alcanza a la C o de color verde.
En la gama S-Max se ofrece en acabado Trend por 40.288 euros y Titanium por 43.368 euros, mientras que en el Galaxy solo está disponible para el Titanium a un precio de 47.337 euros.
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