Despiden a Daniel Ricciardo por la puerta de atrás. Se apaga la sonrisa más brillante del paddock

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Daniel Ricciardo ha vuelto a ser despedido, esta vez al estilo RedBull. Aunque era sabido por todos que Singapur sería su última carrera, no se esperaba un trato tan pobre para un piloto que ha dado a la marca energética 8 victorias y un legado remarcable. Liam Lawson vuelve a ser el sustituto escogido para las últimas carreras y es cuestión de tiempo que se anuncie su continuidad para 2025.

Aunque en la Fórmula 1 se ha asentado el pensamiento entre los aficionados de que “eres tan bueno como tu última carrera”, lo cierto es que con Daniel Ricciardo es difícil que eso suceda. Los cuatro o cinco años de su “prime” fueron tan impresionantes, que a pesar de hoy sea una sombra de lo que fue, se le recuerda por sus mejores hazañas.

Nacido en Perth (Australia 1989) pero con ascendencia italiana, su paso por las categorías inferiores fue tan rápida como sorprendente. Se inició en el karting tarde, con 9 años. Pasada su adolescencia probó suerte en las categorías de Fórmulas regionales para luego hacer un año y medio de Formula Renault 2.0, un año de Formula 3 y un año de Formula Renault 3.5.

Ricciardo,Daniel Ricciardo,Red Bull,Liam Lawson

Lo que pudo ser y no fue 

En 2011 da el salto a la Formula 1 de la mano de Hispania Racing, el modesto equipo español, apenas un par de años después de sorprender a Red Bull en unos test privados. En su debut poco pudo hacer, pero dos buenas temporadas en Toro Rosso le valieron para subirse al Red Bull tras la marcha de Mark Webber. El resto es historia.

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Ganó por 70 puntos a todo un Sebastian Vettel que venía de ganar 4 títulos consecutivos. Consiguió las primeras victorias y empezó a forjar su legado como líder del equipo tras la marcha del alemán a Ferrari. En los próximos años sería reconocido por dominar el noble arte del adelantamiento con los ‘divebombs’. 

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No había piloto que pudiera frenar más tarde que él cuando tenía el coche y el día bueno. Ricciardo se había convertido en un piloto rápido, eficaz, milimétrico y excelso en el cuerpo a cuerpo. Para muchos entraba dentro del Top 3 de los mejores pilotos de la parrilla en esta época gloriosa. La comidilla del paddock entre 2015 y 2018 era clara. Todos veían a Ricciardo como campeón el día que tuviera las herramientas. 

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El apagón de la sonrisa de Ricciardo

La apuesta de Red Bull por Max Verstappen (que fue un acierto a la vista de los resultados), hicieron que Daniel y su entorno se replanteasen su futuro. Una oferta millonaria de Renault, las tensiones internas con la joven promesa y la negativa a ser un segundón acabaron con el sueño de llegar más lejos. 

Ricciardo,Daniel Ricciardo,Red Bull,Liam Lawson

Su paso por Renault no fue nada malo, pero ya no era lo mismo. El cambio de coche fue a peor como era previsible y los resultados con los de Enstone nunca llegan. Con la pandemia llegó Zak Brown como salvador, con un proyecto en ascenso como el de McLaren, pero nadie contaba con que Norris acabaría destrozándole la moral y la carrera.

El británico todavía no estaba maduro y el ‘3’ venía a liderar el equipo de Woking. Su falta de adaptación a un coche que no hacía lo que quería le dejaron en muy mal lugar, y luego su cabeza hizo el resto.

La redención de Monza fue un oasis en el desierto, que más que espabilar le terminaron por rematar. Era el principio de un fin que se alargó demasiado.

Ricciardo,Daniel Ricciardo,Red Bull,Liam Lawson

En 2021 Norris le sacó a Ricciardo 45 puntos. En 2022 casi el doble. Su regreso en 2023 como reemplazo del pobre Nyck de Vries fue visto como una última oportunidad. Estuvo sobre la mesa para sustituir a Pérez, pero la inconsistencia y la batalla contra Tsunoda han hecho insostenible su permanencia.

Por la puerta de atrás

Red Bull es conocido por el poco temple para tratar a sus pilotos, aunque esperábamos que una figura tan mediática y que tanto ha dado a Red Bull tuviera un ‘adiós’ a su altura. La gestión no podría haber sido peor. El rumor de que Singapur sería su última carrera ya venía de carreras atrás, pero nadie contaba con una despedida tan pobre. 

Ricciardo,Daniel Ricciardo,Red Bull,Liam Lawson

En la cita nocturna de Marina Bay todos actuaron como si nada, aunque solo faltara confirmar la oficialidad. Las despedidas el último día ya daban a entender la crónica de una muerte anunciada, y ha habido que esperar cuatro días para conocer la noticia (en un escueto comunicado con la boca pequeña) de que el australiano no seguiría en favor de Liam Lawson.

«Daniel ha sido un verdadero caballero tanto dentro como fuera de la pista y nunca ha dejado de sonreír. Le echaremos de menos, pero siempre ocupará un lugar especial en la familia Red Bull», dice Laurent Mekies, director de Visa Cash App RB.

Ricciardo se ha querido marchar con la cabeza alta. Sabe que no ha estado a la altura estos últimos años, que su cabeza sobrepensante ha acabado con la confianza que un día tuvo para sorprendernos en la pista, pero no se arrepiente de nada.

“He amado este deporte toda mi vida. Es salvaje y maravilloso, ha sido todo un viaje.  A los equipos e individuos que han sido parte de esto, gracias. A los fans que aman este deporte a veces más que yo, jaja, gracias. Esto siempre tendrá sus altibajos, pero ha sido divertido y, siendo honesto, no cambiaría nada. Hasta la próxima aventura.”

Daniel Ricciardo emocionado en su Instagram.

El paddock despide a su sonrisa

La reacción del paddock y de los propios pilotos hacen ver que era un piloto muy valorado. Verstappen, Alonso, Hamilton, Russell, Gasly y hasta equipos rivales han querido despedirse del ‘honey badger’.

Será recordado por sus grandes hazañas. Por China 2018 y ese ‘divebomb’ a Bottas, por aguantar sin parte eléctrica en Mónaco hasta conseguir la victoria, por la redención de Monza y el ‘shoey’. Por su carisma y calidez humana y por su protagonismo, también, en el documental de Netflix.

Lo bonito de esta historia es que sus años malos, nunca podrán borrar la que un día fue la sonrisa más brillante del paddock.

Sobre el autor

David Moreno

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