Inspirada en el legendario Alpine A110 que participó en el Tour de Corse de 1975, esta nueva serie limitada se distingue por su diseño icónico y su interior deportivo. Diseñado pensando en los rallyes, Alpine A110 Tour de Corse 75 combina agilidad y rendimiento gracias a su chasis y a su motor de 300 CV, sumergiendo a sus pasajeros en las sensaciones del Tour de Corse, “el rally de las 10.000 curvas”.
La carrocería pintada de color amarillo contrasta con el capó y el techo de color negro. La icónica decoración bicolor negra y amarilla se complementa con elementos decorativos en blanco y negro, característicos del « Tour de Corse 75 ». La firma en la aleta delantera izquierda se complementa con un icónico motivo en las puertas y una línea blanca que recorre el borde del capó. Además, se ha integrado sutilmente el número 7 en la parte trasera como referencia a la berlinetta de rally de la época.
Los asientos baquet Sabelt Racing llevan bordado el nombre del Tour de Corse 75 y pueden equiparse con arneses de competición. En el exterior, las llantas Grand Prix Blanco Brillante de 18 pulgadas y las pinzas de freno Brembo de color naranja demuestran el espíritu de competición de esta serie limitada.
Se trata de una edición exclusiva, ya que la producción de Alpine A110 Tour de Corse 75 está limitada a 150 unidades. Por ello, cada comprador recibirá una placa con la unidad que compre, del 1 al 150. Esta edición limitada también contará con el nuevo sistema multimedia Alpine con conectividad AndroidAuto™ y Apple Carplay™. En España, se podrá reservar en la red de Centros Alpine a partir de hoy mismo, 16 de junio, y tendrá un precio de 81.900 euros, IVA incluido.
Alpine A110 Tour de Corse 1975: Historia al alcance de la mano
En la carretera, la serie limitada A110 Tour de Corse 75 toma el relevo de un vehículo mítico en el asfalto del trazado corso. A sus mandos, se podrá rememorar la apasionante historia del Tour de Corse del año 1975. Creado en 1956, el Tour de Corse es una de las pruebas más emblemáticas del deporte del motor, y del rally en particular. En 1967, la competición se integró en el Campeonato de Francia de Rallyes y en 1973 se convirtió en la prueba francesa clave del Campeonato Mundial de Rallyes.
Dos años más tarde, 77 equipos tomaron el asfalto corso, pero sólo 22 de ellos llegaron a la meta, una clara muestra de la dificultad de esta etapa. Debido a esto, la edición de 1975 fue el escenario de múltiples sorpresas. Mientras el Alpine A110 y el Lancia Stratos HF luchaban por la victoria, todo se decidió en la última especial. La diferencia era de entre 5 y 30 segundos entre ambos antes de la última etapa. Fue en el último sector donde libraron la última batalla al lograr el mismo tiempo. El Alpine quedó atrás por una diferencia mínima, treinta y dos segundos le separaron del escalón más alto del podio.
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